jueves, 10 de marzo de 2011

Continuación del Capítulo 2

...allí se encontraba él. Era casi perfecto, un joven inigualable... En su mano sostenía un skate desgastado, y sus ojos inquietos me sostenían la mirada...
Sin darme cuenta me quedé mirándolo fijamente durante más de dos minutos; fue entonces cuando todos reaccionamos. Nos miramos perflejos, y por fin alguien habló, Nina:
-Oye, ¿qué haces ahí tirado?
-Emm... es que no ví el arbusto mientras patinaba y bueno, como ves me caí dentro de él, je je...
-Pero,  ¿te...te encuentras bien?- respondí con un cierto nerviosismo que ni yo misma comprendí.
-Ahora mejor.
De nuevo se hizo el silencio, ahora fue Pinki quién lo rompió, con uno de sus sonoros ladridos.
-Bueno, me presento... Me llamo Santiago, si quereis me podeis llamar Santi.
-Yo soy Nina y ella Dafne- respondió Nina señalándome.
La tarde se pasó rapidísima. Santi parecía un buen chico, nos trató genial, ¡hasta nos acompañó a nuestras casas!
-Bueno, aquí es mi casa. Nos vemos otro día, ¿no?- le dije, impaciente por su respuesta.
-Yo creo que sí. A menudo voy a ese parque a patinar.
-Pues entonces, ¡adiós!
-¡¡Adiós!!- me respondió Santi con una energía increíble.
Me quedé mirándolo fijamente, hasta que él me guiñó el ojo. Era azulado, un tono precioso...

No hay comentarios:

Publicar un comentario